Escuela de sensatez

En este año que ahora comienza me gustaría fundar una escuela de sensatez.

Sensata es aquella acción, decisión o reflexión que, siendo respetuosa con nuestros valores, nos conduce o acerca a algún objetivo deseado y conveniente. Es una sensatez táctica o inteligencia pragmática.

La sensatez exige, por tanto, reflexión consciente y “escucha del cuerpo” en su inconsciente para identificar deseos y objetivos y para verificar su alineamiento con nuestros valores. Es la sensatez de contraste o coherencia.

Exige por tanto sentir e identificar cuál es, de verdad, el propósito que nos lleva a una vida con sentido. Es la sensatez de sentido.

La sensatez es un círculo en el que debemos integrar armónicamente las variables de dirección y coherencia de nuestras acciones para discurrir sabiamente por el camino de nuestros valores.

Solemos asumir también como propios los valores socialmente tópicos, pero ¿conocemos realmente nuestros valores profundos más allá de esos tópicos? ¿Cuánto dedicamos a indagar en nuestro interior para descubrir qué es en última instancia lo que nos mueve a actuar más allá de la supervivencia y del instinto reproductor? ¿Están nuestros deseos y preferencias al servicio de esos dos instintos? ¿Somos conscientes de todo lo que hacemos para satisfacer nuestra necesidad de ser queridos?

Tenemos ahora todo un año por delante para buscar “nuestra” respuesta a estos interrogantes. Comencemos así la “Escuela de Sensatez” pues ¿puede alguien ser sensato sin tener respuesta a estas preguntas?

Alfredo Sanfeliz

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